Todo era
negro, no había nada de luz a mí alrededor. Todo era silencio, nada se movía.
Sentía la angustia en mi corazón, el frío me tenía acurrucada en el suelo (¿?)
y la oscuridad hacia que no supiera donde estaba.
Algo se movió, produjo un susurro tan leve que, de
no haber estado esperándolo, me hubiera parecido que eran imaginaciones mías,
pero no, no lo había imaginado, era real, estaba allí, ahora lo podía oír, lo
podía notar rozando mi piel desnuda…
Poco a poco la luz se hizo, poco a poco vi lo que
había a mi alrededor y lo que producía el susurro….era una serpiente, una gran
serpiente de color blanco, una serpiente que me miraba sedienta de sangre…
MK!
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